Por Eyleen Ríos López
Foto José L. Anaya
El Gran Maestro Leinier Domínguez recibió hoy la bandera que defenderán los equipos cubanos en la Olimpiada Mundial de ajedrez a disputarse entre el 27 próximo y el 10 de septiembre en la ciudad turca de Estambul.
Domínguez, líder del ranking latinoamericano, acogió la enseña de manos del vicepresidente del INDER Antonio López Cubillas y junto a sus compañeros aceptó el reto de situar a ambos conjuntos entre los 10 mejores del certamen.
«Compitan con dignidad e hidalguía, pongan bien en alto a la Revolución y al deporte cubano», dijo el director de Docencia del organismo, Arnaldo Rivero, quien en otra parte de su intervención recordó la tradición de esta disciplina en la isla.
«Corresponde a esta delegación mantener primero la dignidad y el decoro que les caracteriza, y alcanzar resultados satisfactorios para alegría de todo nuestro pueblo», añadió Rivero en la Ciudad Deportiva, también en presencia del vicepresidente primero Roberto León Richards.
Junto a Leinier integran el equipo masculino los también GM Lázaro Bruzón, Yuniesky Quesada e Isam Ortiz, y el Maestro Internacional (MI) Yusnel Bacallao, los dos últimos debutantes en estas lides.
En la selección femenina aparecen las GM Lisandra Ordaz, Oleiny Linares, Sulennis Piña y Maritza Arribas, y aporta la novedad la MI Lisandra Llaudy, actual campeona nacional.
«Ustedes constituyen la continuidad de la leyenda que inició ese genio del ajedrez mundial que fue José Raúl Capablanca y son reflejo de la obra de la Revolución Cubana en el deporte», añadió Rivero ante los mejores jugadores locales.
«Cuba demuestra en cada Olimpiada su desarrollo genuino y puro, y los exhortamos a dar lo mejor en cada partida, a trabajar siempre como equipo, cumpliendo la función que toque a cada uno en cada momento», concluyó.
La cita tiene anunciada la participación de más de 160 países y como ha sido habitual en sus últimas versiones se jugará por el sistema Suizo a 11 rondas con cuatro tableros para hombres y mujeres.
Por Cuba lo más sobresaliente en cuanto a resultados colectivos lo exhiben las muchachas con un cuarto lugar en el 2010, cuando la GM Yaniet Marrero reinó entre las defensoras de los terceros tableros.
Los séptimos escaños de 1990 y el 2004 marcan el tope de los hombres, que entre sus logros individuales guardan las medallas de oro de José Raúl Capablanca (1939) y Reynaldo Vera (1998).
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